La embutidora de forraje permite a los productores realizar en la forma más eficiente y segura reservas de alimentos de alta calidad para la producción de carne y de leche, así como para la producción avícola y porcina, entre otras.
El forraje finamente picado se vuelca sobre la cinta transportadora del acarreador desde la descarga lateral de los vagones forrajeros. El forraje cae en el sinfín de compactación que lo empuja hacia el túnel de embolsado donde es distribuido y compactado fuertemente para que el aire sea desalojado, permitiendo que se produzca una fermentación anaeróbica que asegura la conservación en un medio ácido, manteniendo su calidad nutricional, evitando la proliferación de hongos y bacterias indeseables que deterioran la calidad del alimento.
El alimento así obtenido es de alta calidad y gran valor energético comparado con otros sistemas de conservación de forraje, lo cual lo convierte en un proveedor de energía indispensable, clave en el aumento de la producción de carne y leche.